
Fundada en 1954 por el ingeniero norcoreano Sun Myung Moon, la Iglesia de la Unificación tiene su base en Estados Unidos, donde posee hoteles, periódicos (Washington Times), emisoras de TV, y fábricas de armas. En América Latina su base es la República Oriental del Uruguay y Paraguay. A mediados de los años `70 y de la mano de los militares arribaron a la Argentina. En los ´90 el menemismo lo hizo anclar nuevamente en el país. Ahora se encuentran en Entre Ríos.
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La historia de la secta Moon ?liderada por el mesiánico reverendo Sun Myung Moon- en Argentina se remonta a la década del ´70, haciendo cabecera de playa de la mano de conspicuos altos oficiales militares, luego involucrados por violación sistemática a los Derechos Humanos. Y aunque parezca una contradicción polémica, Moon fue por monseñor Antonio Plaza quien le entregó el título Honoris Causa de la Universidad Católica de La Plata. A fines de los ´80 la secta Moon tuvo un segundo desembarco en Argentina, esta vez de la mano del entonces presidente de la Nación, Carlos Menem, no ya solamente en acuerdos ideológicos (como la primera vez) sino a través de grandes inversiones inmobiliarias, sobre todo, en la Mesopotamia, más precisamente en Corrientes y norte de Entre Ríos.
En cada país están legalizados bajo un centenar de nombres diferentes en prevención de investigaciones judiciales y fiscales, además de ampliar su campo de acción y captación de adeptos. Estas asociaciones o fachadas son: ?Asociación del Espíritu Santo para la Unificación del Cristianismo?, ?Iglesia de la Unificación?, ?Federación para Salvar la Nueva Nación?, la ?Federación de Familias para la Paz Mundial? y la ?Federación de la Mujer para la Paz Mundial? (1), además de fundaciones y universidades. ?En Brasil compraron dos equipos de fútbol, el Cene ms y el Atlético Sorocaba, en Mato Grosso del Sur, donde además están haciendo una fuerte penetración a nivel universitario a través del Colegio Académico para la Reflexión de Principios (CARP). Pero, es la empresa Atenil SA la clave común en los negocios de la secta en Uruguay, Paraguay y Brasil, donde se la investiga por lavado de dinero? (2) y que ahora intenta instalarse en Entre Ríos.
Actualmente, la secta Moon está actuando en varios países latinoamericanos comprando tierras (como en la zona de la Triple Frontera, además de las múltiples inversiones en la República Oriental del Uruguay).
La secta Moon compró en octubre de 2000 un pueblo en Paraguay y que hoy se encuentra en litigio. Según fuentes cercanas a la firma, la cifra exacta que se pagó fue de 13.650.000 dólares por las 390 mil hectáreas adquiridas en el departamento de Alto Paraguay (Chaco). La misma organización también pagó 3.145.000 dólares por las tierras que adquirió en Puerto Leda, ubicada en el mismo departamento, a 150 kilómetros al norte de Casado. La secta Moon tiene personería jurídica en Paraguay y su sede central está ubicada sobre la avenida España y actualmente ocupa la casa que antes pertenecía a la Embajada de Sudáfrica (3).
En el sitio de Eco Portal se denunció las maniobras que la secta hizo para quedarse con dos puertos en Uruguay: El poderoso de Montevideo y el estratégico del Cerro.
El artículo -que lleva la firma de Rodrigo Borda y Mariana Molfino- explica que el 18 de julio de 2001 se cumplió el primer centenario del comienzo de las obras de construcción de la infraestructura del Puerto de Montevideo. Esa transformación tenía como objetivo convertirse en un gran centro de distribución regional, y para eso debía optimizar sus servicios e infraestructura. Simultáneamente, en la zona del Cerro se planearon inversiones de aproximadamente 200 millones de dólares para crear un nuevo puerto en Montevideo. Hoy los orientales, con su fina ironía, comienzan a decir ?Moon tevideo? a la capital de su país.
El puerto de la secta se pensó como un centro operativo para el desembarco definitivo en América del Sur a través de poderosos grupos económicos liderado directamente por el propio reverendo Moon. La compañía gestora del proyecto del puerto libre en el Cerro (?Cerro Free Port?) fue la empresa internacional Atenil SA. Hoy fuertemente cuestionada por el gobierno de Tabaré Vázquez.
Atenil representa en América al WF GROUP. Este grupo económico es encabezado por el reverendo Sung Myung Moon. Es la misma organización que realizó diversas inversiones en EEUU en el área industrial, naviero, auto partes, electrónica y forestal, además de invertir en rubros de servicios y culturales a través del The Washington Times, Universidad de Bridgeport, Academia Kirov, New York Hotels, entre otras iniciativas como la adquisición de la agencia de noticias UPI.
En Uruguay, el Grupo sumó las siguientes empresas: el Banco de Crédito, Diario Ultimas Noticias, Impresora Polo, Victoria Plaza Hotel y Hotel Quiroga (4). En 1996 establece su base en Montevideo dada la intención del Grupo de contar con una mayor presencia industrial en América del Sur. ?En 1999 adquiere la Quinta de Berro, ex sede de la Embajada Argentina en la zona del Prado, que hoy remodelada es la residencia particular del reverendo Moon y alberga en la planta baja un templo? (5).
# La secta en Argentina
La Confederación de Asociaciones para la Unidad de Sociedades Americanas (CAUSA), creada en Nueva York en 1980, es una de las 200 asociaciones civiles ?sin fines de lucro? financiadas por la secta Moon.
El presidente de CAUSA, brazo derecho de Moon y jefe político de la secta es el ex coronel Bo Hi Pak, uno de los oficiales coreanos que el 15 de mayo de 1961 llevaron al poder al dictador Chung Jee Park. El militar se vinculó a la congregación en 1957, cuando era mayor del ejército y trabajaba para las fuerzas norteamericanas de ocupación. Fue director de servicios secretos y creador de la K-CIA (Korean Central Intelligence Agency).
En Argentina, CAUSA inició sus actividades pocos meses antes del golpe militar del 24 de marzo de 1976 y después apoyó activamente a la dictadura. La Iglesia de la Unificación fue legalizada en Argentina el 10 de junio de 1978. Para ello, contó con dos sólidos respaldos provenientes del ejército y de la Iglesia Católica: El general Ramón Díaz Bessone, secretario de Planeamiento durante la dictadura de Jorge Rafael Videla, y monseñor Antonio Plaza, arzobispo de La Plata.
El 15 de noviembre de 1985, tal vez como un intercambio de cortesías, monseñor Plaza otorgó a Sun Myung Moon y a Bo Hi Pak el título de Doctor Honoris Causa; a pesar de que el ?monje? estaba en la cárcel de Estados Unidos por evadir impuestos.
La secta estableció vínculos con el poder financiero de la década ´90. El apoderado legal de Moon en Argentina era el abogado Juan Carlos Almonacid (de estrechos vínculos con el menemismo), quien fuera además defensor del ex cabo de la Policía Federal y ex ministro de Bienestar Social, José López Rega, conocido como ?El Brujo? y creador de la Alianza Anticomunista Argentina (Triple A). Un antecedente del imbricado entorno: ?Rodolfo Barra ?ministro en el menemismo- es hijo del comisario que propuso el ascenso de José López Rega de cabo a comisario general, antecedente cuya divulgación lo irrita? (6).
# La secta en Entre Ríos
La Secta Moon comenzó a realizar importantes inversiones en la República Oriental del Uruguay. A la compra de los hoteles El Victoria Plaza (de Montevideo) y el Horacio Quiroga (de Salto, frente a Concordia), intentaron adquirir el complejo termal de Colón, pero no pudieron cerrar esa operación (7). En Salto también hicieron fuertes inversiones en un pozo de captación de aguas termales y lograron la concesión por 90 años de la explotación de la faz turística de esa ciudad. Al poco tiempo también adquirieron más de 1.700 hectáreas en Entre Ríos. ?Tenemos algunos informes de inteligencia sobre la existencia de esa operación?, dijo el entonces ministro de Gobierno, Justicia y Educación, Faustino Schiavoni, en mayo de 1996, tras señalar su preocupación. En esos años, Schiavoni afirmó que sospechaba que ?las operaciones estaban registradas a nombre de sociedades fantasmas con sede en Buenos Aires? (8).
Actualmente están comprando grandes extensiones de campos en Concordia y Chajarí y hasta alguna vez supieron tentar a más de un legislador menemista para privatizar la represa de Salto Grande. Ahora también están por instalarse en Colón y Concepción del Uruguay para ampliar sus mercados de captación de maderas en el rubro forestal.
Sus vínculos con la extrema derecha en Argentina no tienen límites. Y habrá que estar muy atentos, dado que siguen marcando su presencia en el país, porque ahora -como antes- ?religión?, política, negocios y poder vuelven a ser sinónimos en una Argentina que aún no se repone de su devastación institucional y moral.
# Referencias:
1) Declaración de los Obispos del Uruguay del 13 de noviembre de 1996: http://www.iglesiauruguaya.com/documentos/moon.htm.
2) http://www.eleconomista.cubaweb.cu/2003/nro214/214_534.html.
3) http://www.aciprensa.com/notic2000/octubre/notic1086.htm.
4) http://uruguay.indymedia.org/news.
5) http://www.geocities.com/hemerosectas/iu8.htm.
6) Horacio Verbitsky: ?Un mundo sin periodistas?, Editorial Planeta, 1997, Argentina. Capítulo 8, Página 115.
7) Daniel Enz en http://www.periodicotribuna.com.ar.
8) Daniel Enz en http://www.periodicotribuna.com.ar.
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