Redacción EL ARGENTINO
Adrían Martínez aseguró su continuidad en Racing con la firma de su nuevo contrato hasta 2028, un vínculo que lo convertirá en uno de los mejor pagos de la Argentina pero que además le asegura la estabilidad anhelada por muchos futbolistas.
Este miércoles, la figura más importante de la Academia afirmó que "estoy muy contento por esta posibilidad porque uno tiene la tranquilidad de lo que va a ser el futuro. No es fácil tener estabilidad y todos los diciembres uno está mirando lo que va a pasar", reconoció.
También explicó que "terminar mi carrera acá es la idea, ya hablé con la familia. Voy a tener 36 años cuando termine el contrato. Jugaré después unos partidos en Defensores Unidos (el club de Zárate donde se inició), pero voy a terminar acá".
En cuanto al exorbitante monto de su cláusula de rescisión, estipulado por Racing en 122 millones de dólares para asegurarse el blindaje del codiciado artillero, Maravilla contó: "Le dije al presidente (Diego Milito): 'poné lo que vos quieras, si yo firmo es para quedarme; poné vos un número simbólico, yo me voy a quedar acá'. Así que lo decidieron ellos".
Respecto al interés de otros clubes, reconoció que "había posibilidades y sondeos, entonces Milito hizo el esfuerzo. Gustavo Costas no quería que se le vaya ninguno y la gente te brinda demasiado cariño. La decisión fue de todo un poco y también Dios estuvo al lado mío, sin Él esto no sería posible. Hace unos días que veníamos hablando, pero la dirigencia actuó enseguida, fue todo muy rápido".
Con la felicidad dibujada en el rostro, el nueve subrayó que "Racing es muy importante. Cuando estaba en Defensores Unidos me saqué una foto con Milito y hoy estar firmando un contrato con él es algo inimaginable. Para mi familia es muy emocionante, somos muy humildes y la peleamos con mi mujer, que está conmigo desde que tengo 18 años. Pasaron muchas cosas y hoy estar disfrutando esto es muy importante".
Cuando le preguntaron si se considera ídolo racinguista, prefirió la cautela: "Falta un montón, recién va un año y medio. Hay que sostenerlo, como delantero pasa que tenés un año bueno y después bajás, a veces coincidís en el equipo ideeal y la tenés que empujar nada más. Agradezco a los que opinan eso, pero falta un montón y hay que trabajar".
Cuando le preguntaron si se considera ídolo racinguista, prefirió la cautela: "Falta un montón, recién va un año y medio. Hay que sostenerlo, como delantero pasa que tenés un año bueno y después bajás, a veces coincidís en el equipo ideal y la tenés que empujar nada más. Agradezco a los que opinan eso, pero falta un montón y hay que trabajar".