El pedido con fecha 11 de septiembre, se enmarca en el legajo 4913/2025, que investiga las circunstancias en que se produjo el hundimiento en la Sala Mayor de la ciudad.

El requerimiento, enviado de manera formal a Luis Castillo, director de la Casa de la Cultura, busca esclarecer distintos aspectos vinculados con la organización, el desarrollo y las consecuencias del espectáculo.

Lo que se solicita en el escrito son precisiones sobre: Autorización y evaluación previa del evento: se reclama conocer qué comisión autorizó el recital, bajo qué criterios se aprobó el proyecto y si los organizadores presentaron el seguro de responsabilidad civil obligatorio, tal como lo establece el decreto 12699/2021.

Cantidad de asistentes y estado posterior del edificio: se requiere el número exacto de espectadores, acompañado del comprobante de boletería, y un informe sobre el estado del teatro luego de la función. En particular, se pide detallar la fecha en la que se constató el hundimiento del piso de la planta baja, cuándo comenzaron las reparaciones y cuáles serían los costos estimados de esas obras.

Posible presencia de termitas: el oficio judicial también solicita documentación que confirme si existían registros previos o posteriores a la fecha del evento sobre la presencia de esta plaga en el edificio, incluyendo fotografías, autoridades notificadas y fechas de erradicación.

Mantenimiento general del teatro: finalmente, se requiere un reporte sobre las tareas de mantenimiento realizadas hasta el momento y el estado actual de la histórica sala cultural.

El Teatro Gualeguaychú, considerado un ícono cultural de la ciudad, se encuentra en la mira no solo por los daños estructurales reportados, sino también por la necesidad de determinar si las condiciones del lugar eran las adecuadas para un evento como el que protagonizó la banda platense.

La Fiscalía aguarda la remisión del informe en el corto plazo para evaluar los pasos a seguir en la investigación.

Qué pasó en el Teatro

La sala local fue declarada Monumento Histórico Nacional. Por las serias imperfecciones detectadas, debieron suspender la totalidad de la agenda de junio, julio, agosto, septiembre, y aún continúa sin una fecha cierta de reinauguración.

En primera instancia, los profesionales debían evaluar los trabajos, y aprobarlos o no. En este caso, los empleados municipales comenzaron a retirar todos los bancos para continuar con la inspección en el piso.

Los trabajos para recuperar el centenario teatro, se realizaron tareas por varios años consecutivos y se necesitó de una inversión incalculable.

Desde el Municipio informaron que luego del recital de “Cruzando el Charco” presentado por la Productora Lomavista, se detectó un importante hundimiento del piso del teatro.

Informaron que “se trabaja en la reparación. Fue por tres tirantes subterráneos que se fracturaron. Luego de una primera observación, se comprobó que habían sido afectados por una plaga, presumiblemente termitas”.

Esto ocurrió en junio pasado, mientras que las reparaciones estructurales continúan para poder contar con el Teatro Gualeguaychú. En tanto, los espectáculos fueron reprogramados o reubicados en otras salas y espacios, mientras que los teatreros locales continúan preguntándose qué ocurre con el Teatro del Puerto, inactivo hace casi un año.

En agosto pasado, se retiraron las más de 330 butacas para poder realizar el reacondicionamiento del piso, el cual fue afectado “por una infección que data desde hace más de una década”, dijeron desde el Municipio.

Personal municipal comenzó con el trabajo de remoción de las 338 butacas y la alfombra de la platea principal del Teatro Gualeguaychú. Para mantener los lugares originales de los asientos cuando se vuelvan a montar, en la previa fueron debidamente numerados.

Este trabajo se pudo realizar luego de que toda el área interna del Teatro fuera fumigada y ventilada de manera segura (con monitoreo de niveles de compuestos volátiles), proceso que se realizó a lo largo de las últimas semanas. Así, finalmente, se pudieron retirar las butacas, las cuales fueron puestas a resguardo de manera ordenada en el fondo del escenario.

Asimismo, informaron que el personal especializado de la Comisión Nacional de Monumentos, de Lugares y de Bienes Históricos, aconsejó que el espacio de almacenamiento también fuera previamente fumigado y mientras dure todo el proceso de reconstrucción, serán controladas de manera periódica para asegurar que no haya nuevas infestaciones o reinfestaciones de los elementos resguardados.

Ahora, todo continúa en manos de la Justicia, dado que se trata de un Monumentos Histórico Nacional y su conservación es responsabilidad de quienes están al frente de las áreas estatales correspondientes.