Un día después de conocerse el índice de inflación de mayo, los almaceneros se reunieron para analizar los datos. Aseguraron que muchos productos se mantuvieron, otros bajaron, pero el costo de la energía eléctrica continúa siendo una de las grandes problemáticas.
Redacción EL ARGENTINO
Por Mónica Farabello
El Gobierno presentó el número de mayo: 4,2% y un acumulado anual del 276,4%. A pesar de la celebración de los economistas del gobierno, Argentina volvió a registrar la inflación más alta del mundo.
De todos modos, aseguraron que para junio, se prevé un rebote al 6 o 7 por ciento, por el incremento de las tarifas de los servicios públicos, entre otros factores.
Quienes se hicieron eco de estos números fueron los almaceneros de Entre Ríos. EL ARGENTINO, conversó con Héctor González Paván de la Confederación de Almaceneros, quien aseguró que “la inflación mermó un montón; muchos precios han quedado prácticamente igual, y hasta conseguimos cosas mucho más baratas”.
A pesar de esto, los almaceneros de la ciudad comentaron que en “la calle no hay plata, y la gente viene a comprar por unidad. Se nota muchísimo que la gente está recortando en todo; buscando otras marcas; mirando precios y eligiendo qué llevar”.
Paván sostuvo que el gran problema que los aqueja hoy es el costo de la energía eléctrica que cada vez viene más alta.
“De alimentos estamos consiguiendo más barato el arroz, la harina, los fideos, la yerba, las gaseosas; todo eso está viniendo a precio más bajo”, explicó a EL ARGENTINO, aunque aseguró que algunas empresas continúan especulando con un dólar a 1500 pesos “y no aflojan”.
Las verduras, siguen muy caras
Ante la crisis, los consumidores eligen más productos secos, por sobre la comida fresca. Las verduras mostraron un fuerte repunte en sus precios en estas últimas semanas y así se mantienen.
“El morrón está a ocho mil pesos el kilo y la gente no lo compra”, lanzaron desde la Confederación de Almaceneros. “No hay un mango en la calle, por eso la gente está recurriendo a los almacenes de barrios para conseguir mejores precios”, dijo Paván y agregó: “Hay jubilados a los que le alcanza la plata para diez días, por eso se elige lo esencial como fideos, puré de tomate, yerba que bajó bastante, leche, segundas marcas de gaseosas y algunas galletitas”.
La energía: el gran problema
A pesar de algunas bajas de precios puntuales, los almaceneros señalaron que reciben facturas de la luz que “pasan el millón de pesos; dicen que para julio hay un 80% de aumento. No sé si será cierto”, expresó el trabajador, respecto de la quita progresiva de los subsidios a la energía.
En este sentido, indicaron que de encontrarse alguna solución con esta problemática “Entre Ríos podría crecer mucho más, como Buenos Aires o Córdoba, inclusive generar muchas más empresas y puestos de trabajo”.
Mientras tanto, y a pesar de los dichos del Presidente Javier Milei, los salarios vienen muy detrás de la inflación y eso también influye en las compras que llegan a los almacenes y supermercados.
La energía sube a pasos escalonados, mientras que los ingresos de los consumidores van muy por detrás. Ese será el gran punto a resolver por el gobierno provincial para revertir la realidad de los trabajadores.
Los precios más altos de la región
La Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas (FIEL) dijo que la suba de los precios semanal fue del 3,8%, frente al promedio del 1% de las semanas previas. De este modo, superó nuevamente a Venezuela, que registró un incremento de los precios del 3,9% y del 78% según el Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF), independiente del gobierno de Nicolás Maduro. En tanto, para el Banco Central de ese país, la inflación fue del 1,4% el mes pasado y del 50% el último año.
A nivel global, tercero quedó Turquía con una suba del 75% el último año y El Líbano cuarto con 58 por ciento.
En América Latina, la inflación anual fue del 7,1% y la de mayo del 0,4%; México quedó cuarto con 4,7% (-0,25 en el mes); Paraguay 4,4% (0,4%); Uruguay 4,1% (0,4%); Bolivia 3,5% (0,6%); Chile 3,4% (0,3%); y Ecuador 2,5% (-0,1%).
En su revisión del programa con la Argentina, el staff del Fondo Monetario indicó que la prioridad de la política monetaria y cambiaria “sigue siendo afianzar el proceso de desinflación y fortalecimiento de las reservas internacionales y el balance del banco central”. (Con información de Infobae)