Gualeguaychú fue escenario de dos exposiciones clave para el futuro del programa de control poblacional de perros y gatos. El médico veterinario Javier Malavasi, presidente de la Comisión de Salud de la ONG nacional e internacional Red de Políticas Públicas, llegó a la ciudad.
Redacción EL ARGENTINO
La primera presentación tuvo lugar en la Banca 14 del Honorable Concejo Deliberante. Durante más de una hora, Malavasi desplegó una exposición clara y respaldada por evidencia científica, ante concejales que participaron activamente con preguntas y aportes que enriquecieron el intercambio.
La segunda instancia fue una charla abierta en el salón de la Cooperativa Eléctrica, donde vecinos y organizaciones protectoras se acercaron para conocer de primera mano los desafíos y urgencias que enfrenta el programa de castraciones.
Pero si hubo un punto que dejó preocupación, fue la ausencia total de funcionarios municipales y colegas veterinarios, actores clave para la implementación del plan. La inasistencia no pasó desapercibida, ya que la realidad del programa actual dista mucho de lo necesario para lograr un impacto real.
Malavasi fue contundente: en Gualeguaychú se deberían realizar al menos 42 castraciones diarias para comenzar a revertir la problemática de superpoblación animal. Sin embargo, los números actuales, entre 7 y 20 por día, según la jornada, están muy por debajo de lo recomendado. Y estos valores no son interpretaciones personales: forman parte de estudios científicos que demuestran que, si no se alcanza el umbral mínimo, el ciclo reproductivo supera a la capacidad de control, condenando al programa al fracaso.
A esto se suma la falta de una estrategia sostenida de comunicación, educación y concientización, aspectos que la ordenanza vigente contempla, pero que hoy se cumplen apenas con la publicación semanal del cronograma de castraciones. Para lograr resultados, se requiere planificación, personal capacitado y, sobre todo, voluntad política.
Malavasi insistió en que la cuestión trasciende lo operativo: el control poblacional es una política de salud pública, que busca transformar la mirada social hacia los animales, promover la tenencia responsable y prevenir problemáticas históricas. No se trata solo de castrar, sino de construir una sociedad más empática y organizada en torno a la convivencia con los animales no humanos.
El especialista también remarcó que, con el paso del tiempo, muchos de los actores más comprometidos —formados y con trayectoria en la temática— fueron apartados, dejando en su lugar a personas que no siempre cuentan con el conocimiento o la dedicación necesaria. En un área que requiere continuidad técnica y compromiso sostenido, estos desplazamientos se sienten como retrocesos.
“Los gobiernos duran 4 u 8 años; quienes defendemos a los animales estamos siempre”, fue una de las reflexiones que sobrevoló ambas charlas. Y resume el espíritu del encuentro: la lucha por una política pública eficaz no puede interrumpirse, porque cada demora es un retroceso, y cada retroceso impacta en los animales que esperan una respuesta del Estado.
La conclusión fue unánime entre quienes asistieron: Gualeguaychú tiene una oportunidad histórica para mejorar, y no puede darse el lujo de perderla.