La iniciativa establece nuevas bases operativas, mayor tecnología y un comando unificado para enfrentar delitos complejos en el corredor fluvial que une a cinco provincias.
Redacción EL ARGENTINO
El Ministerio de Seguridad de la Nación oficializó este lunes el Plan Paraná, un esquema integral para reforzar los controles en la Hidrovía Paraná-Paraguay y prevenir delitos federales como narcotráfico, contrabando, trata de personas y lavado de activos. La estrategia abarca cinco provincias y prevé un despliegue coordinado de fuerzas federales con apoyo de las policías provinciales.
El proyecto, anticipado hace un mes por la ministra Patricia Bullrich, establece casi una decena de bases operativas entre Chaco y el norte de la provincia de Buenos Aires. Aunque la definición de puntos estratégicos puede ampliarse, el Gran Rosario quedó fuera de la primera selección de localidades donde se concentrará el operativo inicial.
Según la resolución 1.307/2025 publicada en el Boletín Oficial, la Hidrovía quedó dividida en seis polígonos territoriales de intervención, desde Puerto Bermejo hasta Paraná Guazú. En cada uno se implementarán nuevas modalidades de patrullaje, monitoreo y trabajo de inteligencia. Santa Fe, Entre Ríos y Buenos Aires son clave en el tramo inferior, donde se reforzarán los controles en puertos públicos y privados.
El Gobierno sostuvo que la circulación de unos 300 convoyes diarios —principalmente barcazas que llegan desde Asunción— configura un escenario propicio para maniobras ilícitas. Señaló que las redes criminales se aprovechan tanto de la extensión geográfica como de las limitaciones tecnológicas de los controles actuales, lo que constituye “una amenaza concreta para la seguridad pública y la estabilidad económica y social de la región”.
El Plan Paraná incorpora tecnología avanzada, incluyendo radares, drones, cámaras térmicas, escáneres de contenedores y sistemas de monitoreo en tiempo real. La meta es mejorar la detección de embarcaciones, cargas y movimientos sospechosos, así como fortalecer la capacidad de respuesta y la coordinación entre organismos.
La iniciativa se desplegará en cuatro fases: planificación, desplazamiento, ejecución y evaluación. A ellas se suma una etapa de flagrancia para medir el impacto inicial y una etapa investigativa orientada a desarticular organizaciones transnacionales.
La conducción del operativo estará a cargo del Comando Unificado Plan Paraná, encabezado por Prefectura Naval Argentina e integrado por representantes de la Secretaría de Seguridad, Policía Federal, Gendarmería y Policía de Seguridad Aeroportuaria. El Gobierno invitó además a las policías provinciales a designar enlaces para facilitar la coordinación en el territorio.
La primera grilla de bases operativas incluye Puerto Bermejo, Resistencia, Corrientes, Bella Vista, La Paz, Paraná, Santa Fe, San Nicolás y Paraná Guazú. Sin embargo, las autoridades dejaron abierta la posibilidad de sumar nuevos puntos en función de la dinámica delictiva y las necesidades operativas.
Con este plan, el Gobierno busca modificar de forma estructural el mapa de control en la Hidrovía, un corredor clave para el comercio exterior del país y, al mismo tiempo, un espacio históricamente aprovechado por organizaciones criminales complejas.