Laurta declaró, pero se negó a contestar preguntas y le agravaron los cargos

Pablo Rodríguez Laurta fue indagado el jueves por la mañana en los Tribunales II de Córdoba por los femicidios de su expareja, Luna Giardina, y de su exsuegra, Mariel Zamudio, y si bien no negó haberlos cometido, se abstuvo de responder preguntas.

La medida procesal fue realizada ante el fiscal de Violencia Familiar Nº 2 de Córdoba, Gerardo Reyes, quien le agravó la imputación: Laurta se encuentra ahora acusado por doble homicidio agravado por mediar violencia de género (femicidio), por el vínculo, por la alevosía, por el uso de arma de fuego y criminis causae (cuando se mata para lograr la impunidad, la misma imputación que se le hizo en Concordia por el crimen de Martín Palacio). En caso de condena, le corresponde la perpetua.

Además, lo acusó por la figura penal de violación de domicilio. Por ahora, no hay acusación por haberse llevado a su hijo.

Tras la indagatoria, que se extendió por poco más de una hora en la sede de la fiscalía y ante fuertes medidas de seguridad del Servicio Penitenciario de Córdoba (SPC), Laurta fue trasladado a la Cárcel de Cruz del Eje, donde seguirá alojado hasta nuevo aviso.

Está previsto que se le realicen peritajes psiquiátricos en los próximos días. Esa medida será clave para determinar si es imputable o no.

Laurta llegó a su cita judicial fuertemente custodiado y con casco balístico, y se le leyó la acusación en torno a los hechos ocurridos el pasado 11 de octubre en un domicilio de Villa Serrana, en la zona noroeste de Córdoba Capital. De acuerdo a la acusación, Laurta ingresó a la vivienda sin permiso y, arma en mano, mató a su exsuegra y luego a su expareja con sendos disparos a la cabeza. Acto seguido, escapó llevándose al hijo en común que tenía con Luna Giardina.

Por consejo de su defensa, Laurta no quiso responder preguntas, según informó el Ministerio Público Fiscal (MPF). No negó los hechos en su contra. Dicho de otra manera: aceptó indirectamente haber cometido el doble femicidio.

Tras evitar responder preguntas, Laurta “sólo hizo referencia a sus denuncias anteriores en Fiscalía de Delitos contra la Integridad Sexual de 1º turno y el pedido de restitución internacional de su hijo”. Como se informó días atrás, esas denuncias fueron archivadas oportunamente por el fiscal Fernando Ávila Echenique por considerarlas falsas.

Concluido el acto procesal, pasado el mediodía, partió el convoy del SPC llevándose a Laurta hacia la Cárcel de Cruz del Eje. Por seguridad para sí, el imputado permanece alojado en una celda en solitario y lejos del resto de la población penitenciaria. La celda cuenta con cámara y vigilancia las 24 horas.

En paralelo al doble femicidio en Córdoba, Laurta está imputado por homicidio criminis causae y con prisión preventiva por el crimen del chofer de Uber Martín Palacios, ocurrido en Entre Ríos. Según la causa, el joven cordobés habría sido asesinado por el propio Laurta días antes y en momentos que se dirigía desde Entre Ríos hacia Córdoba para cometer el doble femicidio.

A poco de salir de Concordia, el chofer fue asesinado y sus restos desmembrados y tirados en bolsas en campos. Aún restan por encontrar partes de su cuerpo. (Con información de La Voz)