El delincuente de 39 años había sido detenido el pasado viernes tras una persecución por la zona oeste, luego de haber sido vinculado al robo de una bicicleta en las inmediaciones del colegio Las Victorias. Horas después de haberle aplicado un arresto domiciliario, lo cruzaron en la calle.
Redacción EL ARGENTINO
Cerca del mediodía del viernes 26 de septiembre, el personal policial de Comisaria Sexta fue alertado del robo de una bicicleta que se encontraba con candado, que momentos antes había ocurrido en la zona del colegio Las Victorias, en calle Urquiza al oeste.
Del hecho también fue noticiado el personal de la Comisaría Novena, que comparte jurisdicción con la Sexta en la zona oeste, divididos por calle Urquiza. Era necesario alertar al personal de ambas comisarías por si se cruzaban con el sospechoso por los distintos barrios.
Justamente fue el personal de la Comisaría Novena el que logró localizar a un hombre de 39 años, que circulaba en la bicicleta por calle Urquiza en dirección al barrio 348. Allí mismo se inició el seguimiento por los pasillos del barrio, pero cuando el sospechoso advirtió la presencia policial, abandonó el rodado e intentó continuar su fuga a pie.
Finalmente, y con la colaboración del personal motorizado de zona oeste, lograron detenerlo en la intersección de calles 3 de Caballería y San Jorge. Fue trasladado a Jefatura y al día siguiente la fiscal Claudia Bohl le tomó declaración indagatoria. Luego, la jueza de Garantías, Natalia Céspedes, le dispuso 20 días de arresto domiciliario.
El lunes pasado por la tarde la situación cambió. El hombre que debía estar cumpliendo la medida en su casa, fue visto caminando por Gervasio Méndez y boulevard Martínez, y enterado de esta situación el fiscal Lucas Pascual dispuso su detención inmediata. El martes, la misma jueza Céspedes le revocó el arresto por el incumplimiento de la medida y quedó detenido en Jefatura con prisión preventiva.