Lo decidió el juez Sebastián Canasello. Para la Justicia, Ariel De Vicentis obstruyó los allanamientos realizados en la causa.
Redacción EL ARGENTINO
El juez federal Sebastián Casanello dictó el procesamiento del jefe de seguridad de Nordelta Ariel de Vicentis por su obstrucción a los allanamientos realizados en la causa en la que se investiga un esquema de corrupción en ANDIS.
La semana pasada Ariel De Vicentis, uno de los encargados de la seguridad en el barrio privado de Nordelta se hicieron los allanamientos, negó haber avisado a la familia Kovalivker sobre el operativo que se iba a realizar.
Aseguró además que cuando se dio cuenta que uno de los Kovalivker se estaba yendo del barrio, avisó a los efectivos policiales. “Estaba de vacaciones…pero quería saber qué estaba pasando”, manifestó. Se ocupó de verificar que se trataba de un operativo legal y aseguró que “el celo profesional” lo llevó a involucrarse en el procedimiento ordenado por la justicia en la causa en la que se investigan posibles coimas en la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS).
De Vicentis declaró hace una semana ante el juez federal Sebastián Casanello y el fiscal Franco Picardi en un legajo paralelo en el que se investiga una posible obstrucción a la justicia y encubrimiento.
Hace dos semanas, cuando el juez Casanello ordenó los allanamientos, Emmanuel Kovalivker casi logra huir con u$s 266 mil en un auto, mientras que Jonathan Kovalivker no fue hallado.
El custodio del barrio había declarado ante la justicia en calidad de imputado de encubrimiento. Negó haber avisado a los dueños del laboratorio Suizo Argentina que se iba a desarrollar un operativo. Dijo que quería “saber qué estaba pasando". "Cuando tomé conocimiento de la llegada de la policía a Nordelta, quise constatar qué estaba pasando", dijo al juez, según recrearon de su declaración.
La droguería Suizo Argentina pidieron la "nulidad absoluta" de la causa
Los dueños de la droguería Suizo Argentina pidieron la “nulidad absoluta” de la causa originada en los audios del extitular de la ANDIS, Diego Spagnuolo, sobre supuestas coimas que irían a manos de funcionarios entre ellos Karina Milei y Eduardo “Lule”Menem.
Eduardo Kovalivker y sus hijos Emmanuel y Jonathan Kovalivker, dueños de la droguería involucrada, se presentaron a través de su abogado Martín Magram y solicitaron la nulidad de la causa.
La presentación fue realizada el viernes pasado cuando el juez Sebastián Casanello allanaba las sedes de la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS) y las de la droguería.
La famosa doctrina del “fruto del árbol envenenado” finalmente fue invocada por la defensa. Esto es que el origen de la causa es una prueba obtenida ilegalmente, y todo lo derivado de ella cae y es inadmisible en un proceso.