Héctor Báez: “creemos que debemos estar cerca de la gente”

Por: Luciano Peralta

“La política no es ni para jóvenes ni para viejos, la política es para aquellos que quieren vivir en un país mejor. Nosotros creemos que otro país es posible”, declaró el presidente del Frente Grande Gualeguaychú, en una entrevista con EL ARGENTINO. Asimismo, nos contó su recorrido, su visión de la política, y las aspiraciones de su partido.

Comienzos y construcción política 

“Una persona comienza su carrera política cuando se involucra en actividades sociales, cuando empieza a participar en algunas instituciones, como clubes de barrio”, comenzó a contarnos Horacio, “yo soy un hombre que vengo del fútbol amateur en su momento. Comenzamos a ver un poco la necesidad de la organización del pueblo a través de distintas actividades. Es muy importante estar cerca de la gente, poder caminar y ver las necesidades”. 

Data sus comienzos en la política en el año 1999, cuando se involucró en el club Defensores del Sur. Con el tiempo, lograron tener un predio propio, con dos canchas. “Cuando lo inauguramos”, relata, “habíamos puesto un mástil y no teníamos dinero para la bandera. Entonces me acerqué a la Secretaría del Concejo Deliberante, el cual lo encabezaba Lisandro Gamarra quien, con el fortalecimiento de nuestra relación, me invitó a participar políticamente, en el Frente Grande (encabezado por él mismo)”. 

“En el año 2014, en el momento en que Gamarra dejó el Frente Grande, Nelio Calza (presidente del partido en la provincia), que venía de ser diputado nacional y buscaba continuar el armado en Gualeguaychú, me hizo una propuesta para conducir el partido. Yo acepté, y comenzamos a idear un proyecto a corto, mediano y largo plazo”.  Inicialmente, ingresó en la gestión municipal de la mano de la figura de Martín Esteban Piaggio, al que acompañó siendo candidato a Intendente, y luego dentro de su gestión. Fue allí donde trabajó ocho años dentro de la Dirección de Deportes, 

-¿Cómo ves la actualidad política, Héctor?

-Actualmente, creo que mucha gente se alejó de los partidos políticos, empezó a descreer de la política, y eso nos complicó para desarrollar proyectos. La gente ya veía que los proyectos no alcanzaban, porque había mal manejo, mala administración de los bienes públicos, se repitió mucho la dirigencia. Como se dice en la calle: ‘más de lo mismo’. Entonces, la gente empezó a ver un cambio, aparecieron figuras nuevas que llamaron la atención, les atrajo, y bueno, los convenció. De pronto nos toca una derrota que duele, porque uno es parte de un armado, con ideología peronista. Soy de esos que creen en las banderas sociales como argumento para gobernar, creemos que debemos estar cerca de la gente. 

-¿Qué fue lo que faltó?

-Yo creo que la gente se cansó mucho de eso de que le dieran el bolsón de comida como una forma de socorrerlo. Cuando hablás con los vecinos, siempre te están pidiendo una salida laboral, pero no he visto a quienes estuvieron en frente de la gestión desarrollar una dinámica activa para el desarrollo de la gente. A través de un oficio, trabajo genuino, para que en algún momento pudieran dejar de recibir esa ayuda de alimento. A veces hay cosas que no se pueden evitar, ya que hacen falta, pero no puede ser eterno, no puede ser permanente. Hay que luchar porque ese plato de comida sea digno del propio trabajo de cada uno. 

-¿Cómo es tu relación con Mario Secco?

-Mario Seco es un amigo, alguien que conozco hace bastante. Por el 2016 lo invité a venir a Gualeguaychú, en su primer mandato como presidente del Frente Grande, y de ahí nació una relación muy buena, tanto en lo personal como en lo político. No viene muy seguido, ya que tiene un mandato en Ensenada desde el 2003, en el que se ha dedicado exclusivamente a que sea una ciudad próspera. Es alguien que empezó muy de abajo, barriendo las calles. A los 15 años empezó a trabajar dentro del corralón municipal y a partir de ahí comenzó su política como gremialista. Llegó a ser secretario general del gremio municipal, y hoy se merece el lugar donde está. Es alguien que no tiene ningún cuestionamiento, y también es quién nos alienta a tomar decisiones que no son sencillas: es así que empezamos a idear un 2025 con lista propia desde el Frente Grande. Es por esos motivos que nos distanciamos del ámbito justicialista y del kirchnerismo. Nosotros queremos tener nuestra propia identidad.

-¿Cómo es ese alejamiento?

-La idea es tener nuestro propio proyecto, generar un cambio institucional. Uno se preocupa cuando ve tanta corrupción, y toda la corrupción se ve del lado nuestro: Kueider, Uribarri y muchos más que van apareciendo. Eso de pronto genera dudas, muchas veces hasta desilusión en compañeros que confiaron, que pusieron el voto y el esfuerzo, trabajaron, caminaron, creyendo en un proyecto. Pero de pronto llegó la decepción. Es por eso que decidimos conformar el Frente Grande de Gualeguaychú, y comenzamos a trabajar en una construcción política que no termina en el 2025. Más allá del resultado, va a continuar hacia el 2027.

-¿Y cómo se trabaja en esta construcción?

-La idea de que es con la gente, con el pueblo, no hay otra: hay que escuchar al pueblo. Es con la militancia de base, que se empiece a comprometer, que pueda soñar. Tenemos que tener bien claros los objetivos, debemos ser muy solidarios con los compañeros, el que le toca estar, está, y el que no puede en ese momento acompañará y esperará su oportunidad, pero tiene que ser amplio. Queremos seguir incorporando a todos aquellos que tengan intenciones y vean en nosotros la posibilidad de poder participar y aportar alguna de sus ideas, ya que eso fortalece la ideología del partido.

-¿Cómo describirías al Frente Grande?

-Frente Grande es un partido que está para sumar, porque la política no es ni para jóvenes ni para viejos, la política es para aquellos que quieren vivir en un país mejor. Nosotros creemos que otro país es posible. Por eso, vamos a incorporar distintas miradas y construir un espacio en donde se pueda contener, se pueda hablar con la verdad y si sirve también para sacar aquella basura de la política, aquellos dirigentes que solamente han hecho un recorrido político para llenarse sus deseos personales, lo vamos a hacer. Vamos a nacer, si hay que volver a nacer políticamente.

Hoy me toca a mí conducir el partido, seguramente habrá a futuro otras personas, pero siempre con una consigna: de que esto es entre todos. Acá hay una necesidad de generar dirigentes que generen confianza en la gente, con honestidad (una palabra que pocos políticos demuestran). Si encontramos en el camino algún corrupto, tiene que ser la política la que los saque, porque el pueblo no votó a nadie para que se llene los bolsillos y abandone las necesidades del pueblo que lo votó.