“Hogar, un encuentro con Dios”, un espacio de oportunidades

Allí llena su canasta con bandejitas de pepas, escones, galletitas y palmeritas y comienza su caminata hacia el centro de la ciudad. A veces se toma el colectivo. Una vez en el centro, se ubica en la esquina del Banco Galicia y allí ofrece con simpatía y respeto a los vecinos los productos que hacen los chicos del “Hogar, un encuentro con Dios”. Facundo es una de las 25 personas que viven como una familia en el centro de rehabilitación de adicciones que está a cargo del pastor de la Iglesia Evangélica Néstor Rolando López.

El Hogar funciona desde hace casi tres años en la ciudad y pertenece a una Iglesia Evangélica madre que nació en 1986 en la ciudad de Témperley, provincia de Buenos Aires, bajo la dirección del pastor Víctor Gómez. En Buenos Aires existen unos veinte hogares, mientras que en Entre Ríos hay dos: en La Paz y Gualeguaychú y además existen hogares en casi todas las provincias del interior del país.

En el “Hogar, un encuentro con Dios” de la ciudad se albergan actualmente cerca de 25 personas, jóvenes y adultas que encontraron aquí una nueva oportunidad en sus vidas. Son todos hombres que han pasado por momentos muy difíciles y ahora están recuperándose de diferentes adicciones y ayudan a otros a hacerlo. Algunos que ya hace un buen tiempo que están recuperados, hoy coordinan el lugar y ayudan a los recién llegados a adaptarse a esta vida.

En la Granja, lugar que alquilan ubicado en calles Tropas y Paso del Tala (detrás de la antena de Claro), los internos realizan diferentes tareas cotidianas como cultivo de verduras y hortalizas, además de abocarse al mantenimiento del lugar y también aprenden algunos oficios.

Por el momento, no reciben ningún subsidio ni aporte estatal aunque la comunidad siempre colabora comprando la mercadería que producen en la panadería y además, un grupo de profesionales trabaja con ellos.

Se trata de un lugar totalmente gratuito para quien tenga la voluntad de dejar una adicción e iniciar una nueva vida.

“Hogar, un encuentro con Dios” hay personas de Gualeguaychú, Concepción del Uruguay, Concordia y Paraguay y aquí no sólo recibe a personas con adicciones sino que las puertas están abiertas para quienes no tienen donde vivir, tal es el caso de Facundo.

Este Hogar, cuenta con tres sectores: la chacra a donde van los recién llegados (Granja), la Panadería donde se fabrican diversos productos que luego son vendidos en la ciudad y un departamento a donde van los que ya hace un tiempo que están en el Hogar y comienzan a aprender a tener responsabilidades y ser independientes.

La granja

La Granja es un lugar agradable, pacífico en el que conviven sin problema todas las personas que se están rehabilitando, con animales y la naturaleza. El lugar tiene el pasto bien corto y la vegetación muy cuidada ya que parte del tiempo diario lo usan manteniendo el lugar en óptimas condiciones y además porque muchos familiares suelen ir a visitarlos y para ellos es un orgullo mostrar lo que hacen a diario.

Allí realizan actividades como cosechar frutas, verduras y hortalizas para su consumo y aprenden oficios como carpintería o la panadería. Arreglan el lugar y las tareas y responsabilidades diarias están divididas entre todos. La organización es importante.

Quienes viven en la granja tienen una rutina que cumplir. A las 6:30 se levantan, desayunan y luego comparten la Biblia. Luego, el grupo que “canastea” sale rumbo a la panadería (ubicada en Irazusta al 1.600) y se va a trabajar al centro de la ciudad. Tras almorzar, por la tarde se vuelve a compartir la palabra de Dios, de 18:30 a 20:30 tienen una breve recreación y por último se cocina para la cena que es a las 21:30.

Matías es otro de los vendedores que los vecinos pueden ver en el centro de la ciudad “canasteando”, como ellos le llaman. Él dijo a EL ARGENTINO que “la gente nos ayuda mucho y además nos preguntan de dónde somos y demás. Nosotros aprovechamos la oportunidad para contarles dónde está ubicado el hogar y les contamos que es gratuito y que es abierto para todos”.

“Ellos aprovechan la oportunidad de trasmitir el mensaje. Es lo que se denomina el ‘testimonio’ de cada uno. Esto puede servir de mucho a una madre que puede tener un hijo en esta situación, a un hermano o a un adicto”, explicó el pastor López quien está a cargo del Hogar de la ciudad.

En la granja hay personas adictas que tienen oficios, como albañiles, ayudantes de albañiles, plomeros, gasistas, que desean poder trabajar y que lo hacen con el acompañamiento del pastor.

Además, con los productos de la panadería que se venden a diario (son siete chicos los que salen a vender) se cubren los gastos básicos de la Granja y el departamento. Además cada uno se lleva un incentivo económico por lo que no les queda margen para hacer gastos extras.

Testimonios

Algunos testimonios de quienes viven en el “Hogar un encuentro con Dios” hablan de experiencias de vida muy difíciles.

“Muchos de los que estamos acá pasamos por la cárcel, porque la droga y las adicciones muchas veces te llevan por caminos que no son buenos. Pero la experiencia de cada uno sirve para encontrar un sentido a la vida. Nos apoyamos mutuamente y charlamos mucho, pero la decisión de salir adelante es algo muy personal”.

“Uno debe valorar cada día en la Granja y tratar de no recaer, porque sino no sirve de nada todo el tiempo que llevemos limpios”.

“Si bien cada uno tiene su historia pesada, acá podemos almorzar todos juntos, sin discutir. Somos como una familia y nos apoyamos unos a otros. Jamás se ha vivido una escena de violencia y por eso creemos que Dios está presente acá junto a nosotros y el quiere que salgamos adelante. De otra manera no puedo explicar lo que sucede acá”.

“Aquí vienen chicos que no son creyentes. Yo no creía en nada pero a la larga terminás acercándote a Dios”.

Un nuevo proyecto

Desde hace una semana, todos los domingos a partir de las 15, integrantes del Hogar decidieron abrir un merendero en la Iglesia que poseen en avenida Irazusta 1621 (y Pereda).

“Nuestra idea es comenzar con un merendero y luego poder realizar un almuerzo para toda la gente del barrio. No es que a nosotros nos sobre pero siempre hay un corazón dispuesto”, indicó Roberto uno de los encargados de la granja que es un adicto recuperado y cree que debe devolver todo lo que Dios hizo por él.

“Los chicos se sienten útiles haciendo estas cosas, ahora están haciendo unos bancos para la Iglesia… todo esto les hace muy bien. Los hace sentirse útiles”, añadió Roberto.

¿Con qué colaborar?

-Alimentos no perecederos (para el merendero).

-Ropa de cama de invierno (frazadas)

-Ropa de invierno (pulóver, camperas, pantalones, medias, camisetas)

-Calzado.

-Profesionales que deseen colaborar.

¿Cómo? Contactarse a través de Facebook: Hogar un encuentro con Dios (Gualeguaychú). Las donaciones se pueden llevar a Irazusta 1621, donde está la panadería y la Iglesia (siempre hay alguien) o ir a la Granja

También pueden comunicarse con el encargado de la Granja, el pastor Néstor López al 03446-15-308688.

POR ROCIO FERNÁNDEZ

EL ARGENTINO