
Ubicada en el parque industrial de Villaguay, la planta requirió una inversión de 16 millones de pesos. Cuenta con características únicas en su rubro, y promete cumplir con los objetivos de trazabilidad que exigen los países más exigentes.
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El miércoles 3 de octubre la firma Las Camelias inauguró en el parque industrial de la localidad de Villaguay, ubicado sobre la ruta 18, la más moderna planta de alimentos balanceados de Sudamérica. En la oportunidad estuvo presente el gobernador Jorge Busti quien destacó el crecimiento de la avicultura en la provincia y el secretario de la Producción Daniel Wleschen.
La nueva estructura cumple con los objetivos de trazabilidad que exigen los países importadores, y pretende ser elaboradora de alimentos balanceados de muy buena calidad nutricional, excelente presentación física, con tratamiento térmico que mejore la digestibilidad de las materias primas y que evite la posibilidad de contaminaciones cruzadas.
# El proyecto
Raúl Marsó, director de Las Camelias S.A., comenta cómo surgió la posibilidad de la inversión: "en el proceso de crecimiento de nuestra empresa advertimos que una de las actividades que teníamos que desarrollar era la parte de producción de alimentos balanceados, dada la importancia que tiene en el proceso completo, porque es el cambio de las materias primas que vienen del campo, para presentarla en la mesa del pollo".
Se trata en cierto modo de ver la forma de que este alimento logre la máxima eficiencia del pollo en el galpón, por eso desde la empresa se pensó en buscar una solución a una necesidad dentro de la cadena de producción avícola. "Ahí surgió Villaguay como posibilidad, un lugar en el centro de la provincia, cercano a las zonas productoras de granos y también en el borde de lo que es la integración nuestra que llega a esa zona", explica Marsó.
Una vez decidido el lugar de ubicación de la planta, fue necesario buscar la mejor tecnología disponible, una tecnología traída de Holanda en consonancia con lo que piden los clientes de una empresa como Las Camelias, donde el aspecto central está en lograr una perfecta trazabilidad. Respecto a la tecnología aplicada, el director de la empresa afirma: "en esto no hay que quedarse corto, todo va creciendo tan rápido, los adelantos son tan importantes y hacen al negocio avícola".
# Características de la inversión
La planta de producción de alimentos balanceados, que tiene una capacidad de producción de 50 a 60 toneladas por hora y que trabajará en dos turnos de 8 horas, tiene la particularidad de que, a diferencia de las plantas tradicionales que primero muelen las materias primas y luego las pesan, en este caso primero se pesa y luego se muele, lo cual le da una mayor uniformidad de la granulometría del producto. A su vez, tiene la posibilidad de ampliar 30 toneladas para llegar a un máximo de 80 tn/hora con el agregado del equipo necesario pero sin necesidad de modificar la estructura.
En lo que podría denominarse "la cocina" del alimento, las materias primas reciben un tratamiento térmico lo suficientemente prolongado como para asegurar que bacteriológicamente el alimento esté pasteurizado para poder llegar a las granjas sin ningún tipo de problemas para las aves. En ese proceso se eliminan patógenos que puedan dañar el intestino de las aves, volviendo disponible nutrientes que necesitan calor para poner de manifiesto su calidad.
La planta cuenta además con un laboratorio para control de las materias primas y los alimentos terminados, donde se pueden realizar análisis de mico toxinas en cereales, humedad, proteínas, etc. En cuanto al estricto control que requiere su funcionamiento, Marsó explica: "tiene un control centralizado del proceso, o sea la planta se maneja desde una oficina y a distancia, y esto hace que sea muy versátil y muy segura de operar".
Esta estructura se complementa además con una planta de acopio con capacidad de recibo de 200 toneladas por hora y la posibilidad de limpiar y secar el cereal a un ritmo de 120 tn/hora. Esta construcción forma parte de la logística que se necesita para poder sostener y distribuir toda la producción que arrojará la planta de alimentos balanceados, y que será destinada a las granjas que forman parte de la integración de Las Camelias en todo el territorio provincial.
Conscientes de esto en la empresa construyeron en primer lugar la planta de acopio y acondicionamiento de cereales, y ahora se encuentran trabajando además en una nueva planta, esta vez de tratamiento de soja. "La idea es poder utilizar también una materia prima que se produce mucho en esta zona. La soja como tal no se le puede dar a las aves, sino que hay que buscar que sea utilizable a través de un tratamiento término", explica el director de la firma.
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