El endurecimiento de la política monetaria generó fricciones entre la autoridad y las entidades financieras, en medio de un mercado con escasez de liquidez. La situación se agravó tras la licitación fallida del miércoles.
Viernes, 15 de Agosto de 2025,
10:32
Redacción EL ARGENTINO
La reciente serie de medidas adoptadas por el Banco Central de la República Argentina (BCRA) para absorber los pesos excedentes desató un choque abierto con los principales bancos del país.
La entidad que conduce Santiago Bausili defendió la modificación en el cálculo diario de los encajes, que reemplaza el promedio mensual, y aseguró que su impacto sobre la liquidez sería neutro gracias al aumento en la capacidad de integración con títulos especiales. Sin embargo, los financistas alertaron que la medida reduce su margen de maniobra y eleva el riesgo de incumplimientos.
En un encuentro técnico entre el Central y representantes de las entidades financieras, los bancos plantearon que la “ventana” entre el cierre del mercado de pesos y el dólar MEP es muy corta, lo que podría derivar en problemas operativos diarios. Además, solicitaron ampliar el horario de pases activos y elevar el tope del 5% de la Responsabilidad Patrimonial Computable (RPC) para adaptarse a las nuevas exigencias. La principal preocupación es la severidad de las sanciones: un día de incumplimiento se considera como mes completo no cumplido, y tres meses consecutivos activan penalidades mayores.
El contexto de alta volatilidad se evidencia en el salto de las tasas de interés, que en semanas recientes pasaron del 29% al 69%. La noticia de la suba de encajes incluso irrumpió en una reunión del Directorio del Banco Provincia, donde se discutían los problemas para administrar el pago de créditos en medio de la escasez de liquidez.
El BCRA subió los encajes en cinco puntos porcentuales, del 45% al 50%, y duplicó la penalización por evasión, pasando de multiplicar la tasa TAMAR por 1,5 a hacerlo por tres. La comunicación “A” 8302 establece que los bancos podrán cumplir con estas exigencias mediante la integración de bonos que se licitarán el próximo lunes a tasas TAMAR cercanas al 49%, 20 puntos por debajo de la última licitación.
El ministro de Economía, Luis Caputo, ratificó la política de astringencia monetaria en el streaming Carajo: “No vamos a hacer que ningún peso vaya al mercado” y adelantó que no habrá compra de dólares en los próximos meses. La decisión busca evitar presión sobre la divisa, en un contexto electoral complejo y con vencimientos de deuda por más de $24 billones hasta octubre.
El panorama combina rigidez operativa, sanciones estrictas y una liquidez ajustada, generando un clima de tensión que mantiene a los bancos y al Gobierno en un delicado equilibrio, mientras buscan que las medidas monetarias no desestabilicen el mercado cambiario ni la capacidad de financiamiento de las entidades.
Comentarios
Tu comentario ha sido enviado, el mismo se encuentra pendiente de aprobación...
[X]
IMPORTANTE: Los comentarios publicados son exclusiva responsabilidad
de sus autores Diarioelargentino.com se reserva
el derecho de eliminar aquellos comentarios injuriantes o
discriminadores.
