Alcanzó a llamar a la Policía para que la salvaran y ahora lo condenaron

El pasado jueves por la mañana y ante el vocal del tribunal de Juicios y Apelaciones de Gualeguaychú, Mauricio Derudi, se formalizó un juicio abreviado a un hombre que protagonizó en el último tiempo dos casos de agresión que terminaron en denuncias por los delitos de “Lesiones leves dolosas agravadas por la relación de pareja y por mediar violencia de género, y amenazas simples”.

El primero de los hechos ocurrió en noviembre último, cuando el agresor y su pareja comenzaron una discusión porque ella le recriminó que hablaba por redes sociales con otras mujeres. El hombre se levantó de la cama, comenzó a escupirla y forcejear con ella, dejándole marcas en sus brazos y roturas en la ropa.

El siguiente y definitorio hecho ocurrió el pasado 6 de enero, cuando comenzaron a discutir y el sujeto le pegó dos cachetadas en el rostro a la mujer. Ella tomó su teléfono para llamar a la Policía, pero el hombre se lo quitó y cortó la llamada, mientras le gritaba: “vos querés morir, hija de puta”. Luego la tomó de los cabellos desde atrás y mientras la llevaba de los pelos, la mujer alcanzó a tomar un teléfono y comunicarse con la Policía.

El condenado la tiró al piso e intentó en todo momento quitarle el aparato a la mujer, pero ella pudo comunicarse y gritar el apellido del victimario y el domicilio donde se estaba originando la pelea. Cuando el agresor escuchó que la Policía había tomado dato de todo lo que alcanzó a gritar la mujer, recién allí la soltó.

El caso recayó en la fiscal en género Carolina Costa, que rápidamente reunió todo lo necesario en la investigación para resumir el caso a un juicio abreviado, con el consentimiento y la aceptación de responsabilidad del acusado. Como resultado de ese procedimiento, el Juez dictaminó la pena de un año de prisión condicional, imponiéndole reglas de conducta por el plazo de dos años al condenado, que en caso de incumplir se revocará la condena y se transformará de cumplimiento efectivo de inmediato.