Muchos contratos vencieron y la nueva ley está en plena vigencia. Desde las inmobiliarias de la ciudad aseguraron a EL ARGENTINO que las consultas por viviendas para alquilar son constantes; y que los incrementos que se están dando “son en dólares”. ¿Cómo resistir a semejante impacto y sostenerlo con un salario?
Redacción EL ARGENTINO
Por Mónica Farabello
Los contratos de alquiler para vivienda familiar o local comercial que fueron firmados con la ley anterior se siguen ajustando con el Índice de Contratos de Locación (ICL) hasta que terminen. Ahora bien, la ley fue modificada en octubre de 2023, pero este cambio duró muy poco porque en diciembre (mes en que asumió el nuevo Presidente) se firmó un DNU que derogó la ley de alquileres de 2020 y estableció la libre contratación entre las partes.
EL ARGENTINO conversó con Joan Fleitas, referente de Fleitas Propiedades, y explicó que “la nueva ley ya se venía aplicando en gran parte, y ahora se va a terminar de definir en la práctica. Entiendo que lo que va a suceder es que la gente va a querer ajustar trimestralmente y en dólares, en lo posible”.
Esto, sin dudas, generará grandes inconvenientes entre las negociaciones de los inquilinos y los propietarios. Con precios altos en tarifas y alimentos, los asalariados comienzan a hacer cuentas para llegar a abonar el alquiler y todo lo que conlleva el costo de vida.
Mientras tanto, en la ciudad se observa gran cantidad de viviendas ociosas que han sido puestas a la venta. El valor de los alquileres, hoy no le es redituable a muchos propietarios que eligen resguardar su casa o ponerla a la venta.
“Las consultas buscando alquiler son constantes”, explicó Fleitas y agregó: “las consultas de alquiler son diarias. Nosotros tenemos un promedio de 20 llamados por día. La gente nos escribe por las redes sociales, nos visita en la oficina, pero son muchísimos los pedidos”.
Y a mayor demanda, los precios comienzan a subir. Fleitas indicó que con la nueva ley vigente “el aumento que pueden aplicar es que quieran, pero después están las billeteras de los gualeguaychuenses que van a decir si pueden o no pagar ese precio, porque si haces una proyección, en un año terminás pagando cualquier cosa y es una verdadera locura”.
¿Cómo se ajustan los contratos?
Hay dos escenarios posibles -en junio 20024- para las personas o familias que firmaron contratos en junio de años anteriores.
-La firma de un nuevo contrato para quienes concluyen el período de 3 años que empezó en junio de 2021.
-La actualización anual del valor del alquiler para quienes iniciaron el contrato en junio de 2022 o de 2023.
En el primer caso, al iniciar un nuevo contrato las condiciones parten de cero (aunque sea el mismo inquilino). En este caso de dará libertad de precios y negociación según lo estipulado en el DNU.
En cambio, los contratos de alquiler que fueron firmados en junio de 2022 o de 2023, tienen que guiarse por el ajuste anual que marcaba la ley anterior hasta que finalice el período de 3 años.
Según la ley de 2020, para actualizar los valores se utiliza un indicador que publica el Banco Central y que sigue la evolución combinada de la inflación y los salarios.
Según datos publicados, para junio, el aumento supera el 230% anual y en dos años es más del 570%. Estos incrementos vienen subiendo junto con la inflación.
De acuerdo a información suministrada por Chequeados, para los contratos firmados entre julio de 2020 y octubre de 2023, los aumentos del alquiler se aplican sólo una vez al año. En tanto, para quienes hayan firmado su contrato en el mes de noviembre de 2023 y hasta la publicación del DNU, los aumentos serán cada 6 meses.
Con la aprobación de la ley de 2020 se creó el Índice para Contratos de Locación (ICL), compuesto por el 50% del Índice de Precios al Consumidor (IPC) y el 50% de la remuneración imponible promedio de los trabajadores estables (RIPTE), que marca la evolución del salario privado.
En tanto, con las modificaciones aprobadas en 2023 se dispuso una actualización de precios semestral, en base al Coeficiente Casa Propia, el cálculo dispuesto por el Gobierno nacional para la actualización de las cuotas para los créditos de Casa Propia y Procrear II.
Las políticas en torno a las soluciones habitacionales deben ser una prioridad para todos los gobiernos. Actualmente, con la paralización de la obra pública, cientos de barrios a lo largo y ancho del país quedaron en pausa. Detrás de eso, miles de familias a la espera de una respuesta, sea del IAPV, del Procrear o de cualquier modalidad que pueda dar una posibilidad de acceder a la vivienda propia.
En la ciudad, las familias, parejas, o personas solas siguen buscando un alquiler que se ajuste a sus posibilidades. Con los salarios bien atrás de la inflación, se torna una tarea bastante compleja.