Saltar menú de navegación Teclas de acceso rápido
VA DE LIBROS

¿Cómo hacen los pobres para sobrevivir?

Sábado, 9 de Marzo de 2024, 23:55

Redacción EL ARGENTINO

Por Yanina Welp

 

A mediados de 2023, preparando el podcast Coronados de Gloria, sobre los 40 años de democracia en Argentina, hablamos con el sociólogo Javier Auyero y le preguntamos por el imaginario que los sectores populares tienen de la educación pública en nuestro país. Auyero, de hablar sencillo y pensamiento agudo, señaló que sigue habiendo una expectativa de sacar a los hijos de la pobreza a través de la educación. Sin embargo, agregaba, muchas madres, incluso en las villas miserias del conurbano, los envían a las escuelas parroquiales, que son de pago. Esto no se debe a una preferencia ideológica por lo privado o lo religioso sino a que una madre que sale a trabajar limpiando casas, vendiendo comida o prestando algún servicio necesita ausentarse durante horas, a veces haciendo largos trayectos en la ciudad. Las huelgas recurrentes en el sistema público hacían que las escuelitas que llevan las monjas sean preferidas para evitar que los niños queden en la calle, donde la violencia o la droga son una amenaza. La realidad es compleja y en su complejidad hay que intentar entenderla y transformarla. Eso hacen Sofía Servián y Javier Auyero en Cómo hacen los pobres para sobrevivir (Siglo XXI 2023).

Todo empezó de una forma atípica. La madre de Sofía trabaja como empleada de limpieza en la casa de un hermano de Javier Auyero. Cuando su hija decidió estudiar antropología le pidió a sus patrones ayuda para orientarla. Así fue que la cuñada de Auyero los puso en contacto y Sofía y Javier se encontraron. Cuentan en el prefacio que allí se plantearon una pregunta: “¿Cómo y por qué la gente que menos recursos económicos y simbólicos posee tolera, se adapta o batalla contra las condiciones que producen su sufrimiento – la marginación social (el trabajo mal pago, la ausencia de infraestructura básica, la falta de servicios sociales, etc.), la violencia interpersonal, la manipulación burocrática?

Para responderla, Sofía hizo una etnografía en La Matera, un asentamiento ubicado en la periferia del Conurbano bonaerense. La etnografía es un método de recogida de datos que se realiza en el territorio, incluye entrevistas y observación participante y busca conocer los fenómenos sociales desde el punto de vista de los actores. Los capítulos dan cuenta de la información obtenida  (vivencias, datos, percepciones) en capítulos que aportan claves para entender la subsistencia, la acción colectiva, las prácticas políticas (“el Gordo Amor”, el puntero del barrio), el peligro constante, la violencia institucional y el rol comunitario de las mujeres. También hay conceptos, teorías y otros datos que ayudan a conocer el tema analizado con una prosa sencilla y accesible.

Es probable que personas que no han tenido contacto directo o indirecto con un asentamiento desconozcan la importancia que tienen tanto la coordinación y los liderazgos como el conocimiento y la planificación. Además de organizar el presente más inmediato, se trata de pensar un futuro: reservar espacios para una plaza, para un centro de salud, para un comedor… Cuando se reúnen ciertas condiciones vendrá otra lucha por la legalización y el reconocimiento del Estado. En la obra, los capítulos van dando cuenta de las relaciones de cooperación y de explotación o manipulación, de reciprocidad y de intercambio desigual que se producen. Pequeñas historias de vida y notas del diario de campo de Sofía permiten una inmersión en las dificultades que implica vivir en un asentamiento.

Se deja claro que un lider local que se queda con un porcentaje de los planes sociales tiene un comportamiento predatorio o que el que promete estas ayudas a cambio de sexo o de asistencia a manifestaciones partidarias es alguien que intenta extorsionar y manipular. A la vez, se resuelven problemas y de ahí la complejidad de las estrategias para superar situaciones indebidas. (Por traerlo a la discusión actual, que muchos planes sociales estén mal gestionados no debe conducir a eliminarlos sin poner nada en su lugar porque podrían generarse situaciones aún más graves dejando territorios abandonados en manos “del narco”.)  Otra constante es la violencia, desplegada no sólo en las calles, también en los hogares, en las comisarías, en las prisiones. Y el rol central de las mujeres sosteniendo la cooperación, los comedores, los cuidados. Señalan Auyero y Servían que “los habitantes de la periferia urbana son bricoladores. Para sobrevivir cuentan con familiares, vecinos, ‘punteros’ y funcionarios; combinan la ayuda mútua, la asistencia estatal, el trabajo formal e informal, y los emprendimientos ilícitos; fusionan la acción colectiva transgresiva con su participación en redes clientelares” (p.196). Muy lejos queda de este panorama el  “son vagos”, “no quieren trabajar”, “tienen hijos para vivir de los planes” que se escucha con cierta frecuencia entre las clases medias y altas argentinas. Del otro lado de esas “representaciones chatas de problemas sociales” Servián (cuya vida es en si misma un no tan común ejemplo de superación) y Auyero descubren para las y los lectores la heterogeneidad interna, los sueños, expectativas y dificultades que implica vivir en los márgenes.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Seguí las noticias de Diarioelargentino.com en Google News Seguinos en Google News

Comentarios

Tu comentario ha sido enviado, el mismo se encuentra pendiente de aprobación...
Avatar
ver más
El comentario se encuentra deshabilitado

Denunciar comentario

Spam o contenido comercial no deseado Incitación al odio o a la violencia, o violencia gráfica Acoso o bullying Información errónea
Cancelar Denunciar
Reportar Responder
Tu comentario ha sido enviado, el mismo se encuentra pendiente de aprobación...
respuestas
Ver más respuestas
Ver más comentarios
IMPORTANTE: Los comentarios publicados son exclusiva responsabilidad de sus autores Diarioelargentino.com se reserva el derecho de eliminar aquellos comentarios injuriantes o discriminadores.

Teclas de acceso