Desde el Juzgado de Garantías se dispuso un arresto domiciliario hasta el próximo 22 de octubre, para un funcionario público que fue detenido hacia fines de septiembre al constatarse una desobediencia judicial.

En esa oportunidad, en la mañana del domingo 21 de septiembre, y mientras la Policía realizaba las recorridas en el marco del operativo de cierre de boliches bailables, constató que dentro de un automóvil Volkswagen que se encontraba estacionado en calle Rocamora, entre 3 de Caballería y Del Valle, había una pareja.

Los uniformados se acercaron al rodado estacionado frente a un carrito de comidas, en el sector de las plazoletas, y observaron algo que les llamó la atención entre el hombre y la mujer que consumían alimentos. Los uniformados decidieron intervenir e identificar a ambos, y en ese procedimiento se constató que había una irregularidad.

Ambas personas mantenían medidas de restricción de acercamiento vigentes por el término de 150 días, que habían sido dictadas en el marco de una causa por violencia de género denunciada por la mujer. El hombre fue llevado a la Jefatura Departamental y se inició una nueva causa por desobediencia judicial.

La mujer lo había denunciado poco tiempo atrás cuando el hombre se presentó en el domicilio de la denunciante y al ver que ella se encontraba acompañada de un amigo, este hombre lo amenazó y lo golpeó, causándole lesiones que luego fueron constatadas por el médico policial y sirvieron para engrosar las causas en su contra.

Luego de imputarlo por lesiones, amenazas y desobediencia judicial, el agente penitenciario se encuentra bajo arresto domiciliario hasta el próximo 22 de octubre.