Redacción EL ARGENTINO
El titular del equipo médico, Luis Moyano, y los forenses Maximiliano Siromski y Juan Bertozi, practicaron la esperada autopsia al cuerpo de Graciela Santana, con varios puntos de pericias, para tratar de esclarecer si la mujer falleció por un paro cardiaco a consecuencia de haberle suministrado cloruro de potasio.
Vale recordar que esta mujer murió el 8 de noviembre de 2023 en el Hospital Centenario y tres meses después de su fallecimiento una enfermera presentó una nota a las autoridades hospitalarias denunciando el proceder de una colega que atendió a Santana en sus últimas horas en la Terapia Intensiva, informando que le habría suministrado cloruro de potasio y que ello habría originado el deceso.
El tiempo transcurrido entre el fallecimiento y la denuncia que llegó a Fiscalía fue determinante para que se considerara innecesaria la realización de una autopsia, porque se consideró que no habría restos o evidencia de cualquier sustancia que pudo haber ingresado al cuerpo, y el deterioro de los órganos tampoco podrían ayudar a esclarecer lo sucedido.
Sin embargo, esta decisión se retrotrajo ante la insistencia de familiares de la mujer que tomaron conocimiento del caso cuando explotó en los diferentes medios de comunicación, a raíz de una información vertida por el Ministerio de Salud de Entre Ríos, informando sobre el sumario abierto a la enfermera cuestionada.
El martes 14 de mayo se realizó la exhumación del cuerpo en el Cementerio Norte, donde se encontraba enterrado hacía 6 meses y tras permanecer unos días en la cámara de frío de la Morgue Judicial que funciona en el predio, los restos de Graciela Santana fueron trasladados a la Morgue de Oro Verde el viernes 24 de mayo.
Nueve días hábiles más tarde, finalmente se realizó el examen forense que tratará de arrojar luz sobre muchas cuestiones, aunque se espera que el informe de dicha autopsia tardará varias semanas debido a la complejidad de los puntos de la pericia.