Redacción EL ARGENTINO
La Libertad Avanza tenía todo listo para cerrar una jornada triunfal en la Cámara de Diputados. El oficialismo logró aprobar un presupuesto, algo que no ocurre hace tres años en Argentina. Así, La Libertad Avanza consiguió 132 votos afirmativos para aprobar el proyecto en general, pero los 117 afirmativos no alcanzaron, contra los 123 negativos, para defender capítulo 11.
Así, el texto que giró al Senado no incluye todo un capítulo con una serie de normativas impositivas y de subsidios que impactaban en las provincias. El oficialismo sabía que esos eran los puntos más sensibles de la jornada. Se entusiasmó al inicio de la sesión cuando 130 diputados votaron a favor de votar directamente por capítulos y no hacerlo artículo por artículo, como suele hacerse. Sin embargo, entrada la madrugada del jueves, un puñado de diputados del radicalismo y los gobernadores aliados le soltaron la mano al oficialismo.
Por ejemplo, los diputados de los bloques Independencia y Elijo Catamarca, que responden a los gobernadores Osvaldo Jaldo (Tucumán) y Raúl Jalil (Catamarca) no acompañaron con el voto de sus diputados en la votación de este capítulo. Gustavo Saénz (Salta) dividió en las distintas canastas: Yolanda Vega apoyó, pero Bernardo Biella (ambos de Innovación Federal) rechazó esta decisión del Gobierno.
Además, debe tenerse en cuenta que dos diputados radicales que habían votado a favor cuando fue al definición en general se abstuvieron, el crespense Darío Schneider y el chaqueño Gerardo Cipolini. Un poco más a fondo fue el radical por Corrientes, Diógenes González que votó en contra. Se trata de un hombre cercano al líder del oficialismo en la provincia Gustavo Valdés, hermano del gobernador Juan Pablo Valdés.
La oposición tenía todo por perder y se lleva una victoria
El otro punto que explica el fracaso del oficialismo es el rechazo de todo el interbloque Unidos, que integran Provincias Unidas, Coalición Cívica y Encuentro Federal. Este espacio advirtió en la previa de la votación que de ninguna forma iba a acompañar si se votaba por capítulo. Aún así, el oficialismo, envalentonado con su debut como primera minoría, desoyó los avisos de expertos en materia parlamentaria como Nicolás Massot o Miguel Pichetto.
El bloque UP que se mantuvo unido en rechazo de este capítulo, festejó el rechazo a la derogación de estas dos leyes, sancionadas y ratificadas por el Congreso de la Nación, luego de que Javier Milei las vetara. Así, la oposición se anotó una pequeña victoria en una sesión donde el Gobierno tenía todo para ganar y festejar.