Redacción EL ARGENTINO
El pasado fin de semana, el equipo Oroño Team —con base en el dojo Serpiente de Gualeguaychú— participó de una destacada jornada de artes marciales en General Rodríguez, provincia de Buenos Aires.
El evento, organizado por Renegado Fight junto a Niko Vega y Nicolás “Maldito” Jara, reunió a competidores de toda la región en una gala amateur que cerró con broche de oro para los representantes entrerrianos.
Resultados y protagonismo local
Los cuatro peleadores del Oroño Team dejaron una marca en el evento. “Lucas Molina obtuvo la victoria por puntos en la categoría hasta 71 kg, mientras que Rafael García se impuso también por puntos en la división hasta 57 kg. Manu Ferreyra, por su parte, cayó en un combate ajustado, pero dejó una gran impresión por su entrega y técnica” comentó Juan Oroño, entrenador y director del Oroño Team a EL ARGENTINO.
El cierre de la noche estuvo a cargo de Juan Gabriel Oroño, quien ganó la Copa Lucero Promotions, coronando una jornada de alto nivel competitivo y reafirmando el prestigio del dojo en el circuito provincial.
Formación, valores y territorio
Juan Oroño, entrenador y director del Oroño Team, destacó el esfuerzo colectivo y el sentido de pertenencia que atraviesa cada participación: “Cuatro de nuestros chicos estuvieron peleando en General Rodríguez. El pesaje fue el viernes y todos llegaron con compromiso y respeto. Oroño Team una vez más dejó a Gualeguaychú en lo más alto en la provincia de Buenos Aires”, dijo a EL ARGENTINO.
Más allá de los resultados deportivos, Oroño subrayó la importancia de formar personas con valores, disciplina y arraigo territorial. El dojo Serpiente funciona como espacio de contención, entrenamiento y proyección para jóvenes de distintos barrios de la ciudad.
Proyección y comunidad
El Oroño Team continúa consolidando su presencia en el circuito nacional. Cada viaje, cada combate y cada logro son parte de un proceso colectivo que involucra familias, entrenadores y referentes locales.
Desde Gualeguaychú, el dojo Serpiente sigue demostrando que el deporte amateur puede ser una herramienta de transformación, identidad y orgullo barrial.