Por Gimena Blanco

Mucho se habló de una muerte violenta registrada oficialmente. El acta de defunción del 18 de noviembre de 1935, escrita en el Registro Civil de Gualeguaychú, señala a la joven como “Juana Sosa de 23 años”, y no como Blanca Sosa. Ella era soltera, argentina, de oficio labores y domiciliada en la Séptima Sección. Falleció el 17 de noviembre, a la hora seis en Isla Libertad, debido a una herida de arma blanca, según certificó el Dr. Carlos Alberto Savalla Carbo.

El acta fue redactada por Gregorio Vicente Delgado, Jefe del Registro Civil, bajo el número 631 del Libro de Actas del año 1935.

Declaro G. M. Wilson, acompañado del testigo Fernando Cecili Delion, ambos asegurando haber visto el cuerpo.

Hija de Eusebio Antonio Sosa, argentino, fallecido, y de Carmen Gomez, argentina, domiciliada en la misma casa.

Aunque figura como Juana, la posibilidad de que su nombre haya sido Blanca permanece abierta debido a la falta del acta de nacimiento.

Registro del Cementerio Norte

El Cementerio Norte de Gualeguaychú registra nuevamente a la joven como “Juana Sosa”, de 23 años sepultada el 18 de noviembre de 1935 en: Nicho N° 378 fila 7 Sección A, galería 29.

En los detalles del libro se consigna la causa de muerte: “Herida de arma blanca, (navaja)”, Dep. de Policía.

Un dato Clave: El traslado de 1977 y destino final

Una pieza fundamental surge de los registros históricos: El 9 de diciembre de 1977, su hermano Sosa Clemente Ulises gestionó el traslado de los restos.

El registro confirma que, tras ese movimiento, los restos de la joven fueron depositados en el Osario del Cementerio Norte, donde descansan actualmente.

Este dato, hasta ahora no documentado públicamente, aporta un elemento crucial para reconstruir el recorrido post mortem del caso y su tratamiento institucional.

El entorno familiar

La recuperación de documentos también permitió precisar datos sobre su familia.

Su madre, Juana L. Gonzales de Cardoso, falleció el 10 de Febrero de 1964, a los 70 años sin conocer qué es lo que había sucedido con su hija ese trágico día.

Su hermano, Sosa Clemente, trabajador del Ex frigorífico de Gualeguaychú, murió a los 91 años, el 16 de Mayo de 1993 quién finalmente pudo transmitirle a sus hijos la desconfianza que tenía sobre el fallecimiento de su hermana asegurando que a “Juana Sosa la habían matado”.

Estos registros contribuyen a contextualizar el entorno social y familiar de la joven.

Una historia que exige memoria

Aunque la documentación oficial la nombra como Juana, el nombre Blanca persiste en el recuerdo oral y podría corresponder a su identidad real. La falta de un acta de nacimiento continúa dejando preguntas abiertas.

El caso registrado oficialmente como homicidio vuelve a emerger gracias a la recuperación de archivos, la revisión histórica y nuevos datos reveladores. La investigación sigue su curso, con el objetivo final de reconstruir no solo como murió, sino también quién era verdaderamente la joven cuya historia quedó atrapada entre documentos fragmentados, silenciosos y décadas de incertidumbre.

Esta investigación no habría sido posible sin la colaboración de quienes, desde distintos ámbitos, aportaron datos, registros y memoria.

Agradezco profundamente a los trabajadores del Cementerio Norte, personal del Registro Civil, Personal Judicial de Gualeguaychú y Paraná, Familiares directos de Juana Sosa (fallecida) a todas estas personas mi respeto y compromiso para que la investigación continúe avanzando arrojando luz sobre un caso que merece ser contado.

Un proyecto Cultural que unirá historia y sabor local

En paralelo a esta investigación, y como una manera innovadora de acercar la historia al público de “Te Resumo Guale”, se lanzará este 17 de noviembre aniversario de su fallecimiento una edición especial de alfajores temáticos que contará la historia a través de un envoltorio y su presentación. Este proyecto se desarrollará junto a las emprendedoras Marukis y Dulce tentaciones quienes elaboraron dos versiones, una libre de gluten y otra con harina de trigo.

El objetivo es ofrecer a turistas y locales un producto regional que funcione como vehículo cultural, permitiendo que la memoria de esta mujer y su historia siga circulando y despertando interés.

*Comunicadora. Investigación en curso - Gualeguaychú, Entre Ríos.