Redacción EL ARGENTINO
El ministro de Economía, Luis Caputo, dejó una señal clara al mercado sobre la estrategia financiera del Gobierno para el inicio de 2026: la intención oficial es afrontar el vencimiento de deuda de enero sin recurrir a una colocación en Wall Street. El mensaje fue transmitido a través de la red social X, en respuesta a una consulta directa de un operador financiero.
“Trataremos que no la haya. El objetivo es ir eliminando la dependencia que el país tiene con Wall Street. ¿Lo vamos a poder lograr? Nosotros creemos que sí”, escribió Caputo, al ser consultado sobre la posibilidad de una emisión en Nueva York durante enero. El ministro cerró su mensaje con un saludo por las fiestas: “Abrazo y Feliz Navidad”.
La declaración se dio luego de que el usuario @robertoaxelrod le preguntara si estaba prevista una colocación en el mercado internacional para el arranque del año, en un contexto en el que los inversores siguen de cerca las necesidades de financiamiento del Tesoro y la estrategia oficial para administrar los vencimientos de deuda.
El vencimiento de deuda del 9 de enero, el test clave para Caputo
El Gobierno deberá enfrentar el próximo 9 de enero un vencimiento por u$s4.200 millones, correspondiente al pago de Bonares y Globales. En ese marco, en las últimas semanas el Tesoro aceleró la compra de divisas y llegó a concentrar cerca de la mitad de los dólares necesarios, con el objetivo de evitar recurrir a otras alternativas de financiamiento para cumplir con el compromiso.
No obstante, en el mercado no se descarta la utilización de operaciones REPO, un instrumento a través del cual el Gobierno dispone de una capacidad de financiamiento de hasta u$s7.000 millones. Esta opción, sin embargo, implica un costo financiero más elevado en comparación con la acumulación genuina de dólares.
En las últimas dos semanas, entre el 4 de diciembre y el miércoles pasado, el Tesoro Nacional aceleró de manera significativa la compra de divisas y elevó sus depósitos en dólares en el Banco Central de la República Argentina desde apenas u$s97 millones hasta cerca de u$s2.000 millones, según el último informe semanal de Invecq.
El salto, cercano al 2.000%, se explicó por compras estimadas en u$s630 millones, a las que se sumaron u$s360 millones en desembolsos netos de organismos internacionales, principalmente del Banco Interamericano de Desarrollo, y u$s910 millones obtenidos mediante la colocación de Bonares.
De esta manera, el equipo económico encabezado por Luis Caputo se adelantó al anuncio del BCRA de que, a partir de enero, el esquema de bandas cambiarias dejará de ajustarse al 1% mensual para pasar a hacerlo en función de la inflación del segundo mes previo. Además, la autoridad monetaria comenzará a comprar dólares y acumular reservas con el objetivo de avanzar en una remonetización de la economía, que implicaría un aumento de la Base Monetaria desde el 4,2% al 4,8% del PBI. (Ámbito)