Durante la semana pasada se realizaron dos juicios abreviados por hechos de violencia de género, amenazas agravadas e incluso lesiones leves, contra dos hombres que durante el 2024 cometieron distintas agresiones contra quienes eran sus parejas en esos momentos. Ambos recibieron la misma pena: un año de prisión condicional y ciertas reglas de conducta que deberán respetar para que esa pena no se convierta de cumplimiento efectivo.

El más joven de los dos condenados reconoció la autoría de los hechos que se le imputaron, ocurridos el 8 y el 23 de octubre. Primero, y durante una discusión con la joven pareja, la víctima le solicitó que le permitiera responder los mensajes que le llegaban a su teléfono personal, pero el joven actuó totalmente diferente, en una clara intención de infundir temor, le quitó el aparato y la amenazó.

Días después, y también durante una discusión, el condenado tomó una soga y la colgó en un gancho atornillado en el techo donde colgaba la bolsa de boxeo. Se subió a la cama y se colgó del cuello delante de la joven. Cuando ella intentó escapar, el sujeto se descolgó, la sujetó para que no se fuera de la habitación y le dijo que la iba a colgar. Seguidamente la tomó del cuello, la tiró al piso y le presionó el cuello. Ella se descompensó y el imputado le propinó varias cachetadas. La víctima resultó con lesiones en el cuello.

El caso del hombre de 55 años ocurrió a mediados del año pasado y en este caso la violencia incluyó una amenaza con arma blanca. Todo se originó cuando la mujer recibió un mensaje en su teléfono personal y el sujeto le arrebató el aparato de la mano y colocándole un cuchillo en el cuello la amenazó con matarla.