Redacción EL ARGENTINO
El tren sigue con su marcha. La victoria 3-2 en el debut ante Bélgica demostró que esta Selección Sub 17 tiene el ADN de Diego Placente. Ese que trae consigo la resiliencia, el talento, la gambeta y mucho sentido de pertenencia. Y si bien pareciera en los papeles que ya se superó la parada más compleja en la fase de grupos, no se puede subestimar a Túnez, el próximo rival de la Albiceleste.
Y este encuentro toma mayor relevancia porque, el combinado nacional, puede sacar pasaje anticipado a los dieciseisavos de final. Claro, porque en el hipotético caso de que consiga la victoria, le sacará tres puntos de diferencia a los africanos (vienen de derrotar 6-0 a Fiyi). Y dado que en la última jornada los belgas se medirán con los rojiblancos, uno de los dos quedará eliminado en fase de grupos.
Por su parte, el historial con las Águilas del Cartago no data de muchos enfrentamientos, sino todo lo contrario: apenas tres duelos en total. ¿El último? Hace nada menos que 20 años.