En la Asamblea General Ordinaria realizada recientemente, Roberto Frigo fue designado presidente de Cafer, en reemplazo de Juan Balbi, de Aranguren. La entidad, de segundo grado, nació en 1999 como respuesta de ocho cooperativas agropecuarias entrerrianas a la crisis económica de aquel tiempo. Entre sus fundadoras se cuentan las cooperativas de Villa Elisa, La Paz, Aranguren, Urdinarrain, León Solá, Gualeguaychú, Galarza y Seguí; luego se sumó la de Viale.

Frigo, de 62 años, es productor agropecuario y participa del movimiento cooperativo desde hace décadas. Destacó la relevancia del sector, al señalar que “el cooperativismo es un movimiento económico y social muy importante para la vida de los pueblos”, y subrayó su rol en la prestación de servicios al productor: comercialización, acopio de granos, venta de combustibles, asesoramiento técnico, financiamiento, capacitación y servicios de siembra. “Además —añadió—, genera empleo directo e indirecto y participa activamente en las producciones locales”.

El flamante presidente anticipó que iniciará su gestión visitando a las cooperativas de base que están realizando sus asambleas, como las de Urdinarrain y Aranguren, con el propósito de fortalecer el vínculo institucional.

Entre los principales objetivos, Frigo mencionó la necesidad de “seguir acompañando y asesorando al productor, y continuar la búsqueda de financiamiento con tasas acordes a la realidad del sector”. También expresó su anhelo de que “alguna vez tengamos previsibilidad y políticas de Estado”.

Finalmente, remarcó que “en los tiempos duros, tanto en lo económico como en lo climático, las cooperativas fueron el sostén de los pequeños y medianos productores”