El último informe de la Contaduría General de Entre Ríos, correspondiente a junio de 2025, reveló un panorama económico crítico: déficit fiscal de $5.689 millones y financiero superior a $60.312 millones, en un contexto de fuerte ajuste del gasto público.

La provincia, que actualmente debate en la Legislatura un endeudamiento de 500 millones de dólares, carece de inversión real directa y muestra un estancamiento en políticas que mejoren la calidad de vida de la población.

La educación emerge como una de las principales víctimas de este escenario. Datos del Observatorio de Argentinos por la Educación indican que apenas el 38% de las escuelas provinciales supera el promedio nacional en rendimiento académico. A su vez, la partida de Educación y Cultura tuvo un incremento interanual del 74%, muy por debajo de la inflación, lo que en términos reales implica una merma de recursos.

El ajuste se traduce en freno de obras, reducción de suministros y pérdida de poder adquisitivo de los salarios docentes. También impacta la desarticulación de programas nacionales como el Fondo Nacional de Incentivo Docente (FONID) y Conectividad, que deja a miles de estudiantes y educadores sin herramientas esenciales para el aprendizaje.

En paralelo, la obra pública provincial está prácticamente paralizada, con proyectos frenados y ausencia de iniciativas que reactiven la economía local. Especialistas advierten que el recorte simultáneo en infraestructura y educación reduce la competitividad y condena a Entre Ríos a una pérdida de capital humano.

Para economistas como Álvaro Gabás, este modelo repite viejos errores: ajustar, endeudar y esperar mejoras sin un plan productivo que respalde la toma de deuda en dólares. La estrategia, señalan, no puede considerarse un ejercicio de responsabilidad fiscal si su costo recae sobre docentes, estudiantes y trabajadores.

Con un futuro financiero comprometido y sin un rumbo claro en políticas de desarrollo, Entre Ríos enfrenta el riesgo de quedar atrapada en un círculo vicioso de recortes, dependencia del crédito externo y deterioro de su sistema educativo, un pilar clave para su crecimiento de largo plazo.