Sucede que todo indica que se enfrentarán el subsecretario de Derechos Humanos de la Ciudad de Buenos Aires, Claudio Avruj, con el ex vicepresidente de AMIA y DAIA, Julio Schlosser, quien tendrá el respaldo del gobierno nacional.

La particularidad de las elecciones en la DAIA, a diferencia de la AMIA, es que los electores son las instituciones de la comunidad, unas 150, que además tienen pesos electorales distintos, por lo cual es muy importante los apoyos que consigan cada uno de los candidatos.

La candidatura de Schlosser ya está confirmada y su lista también la componen Waldo Wolff, presidente de la Federación Argentina de Centros Comunitarios Macabeos (FACCMA) y Jorge Knoblovits (del club Náutico Hacoaj) como secretario general.

Avruj, ex director ejecutivo de la DAIA y apadrinado por el influyente secretario de Gobierno porteño, Marcos Peña, también trabaja para fortalecer su candidatura.

Según pudo saber Noticias Argentinas, tentó a un economista reconocido internacionalmente para que sea su candidato a vicepresidente y espera su respuesta.

Algunos dirigentes que respaldan su postulación son el ex presidente de la DAIA, Jorge Kirszembaum, el director Ejecutivo de B nai B rth, Jorge Burkman y Mario Feferbaum, presidente de la Fundacion Memoria del Holocausto.

Además negocia con otro referente del macrismo y con influencia dentro la colectividad como el rabino Sergio Bergman, quien representa a los sectores religiosos más modernos pero además entabló en los últimos años acuerdos políticos con el sector ortodoxo que lidera el rabino Samuel Levin.

El Gobierno nacional está distanciado de las actuales conducciones de la DAIA y AMIA en manos de Donzis y Guillermo Borger y espera recuperar terreno de la mano de Schlosser y de Luis Grinwald, cuando en abril del año próximo se celebren las elecciones en la mutual israelí.

El panorama en la AMIA no está tan claro, pero Grinwald -auspiciado por el kirchnerismo- enfrentaría a otro de los miembros de la influyente familia Werthein, Damián Werthein.

Aquel distanciamiento entre la dirigencia comunitaria y la Casa Rosada se vio en algunas cuestiones puntuales en las últimas semanas, como la decisión de la Presidenta de no incluir a sus representantes en la comitiva que viajó a Nueva York para la Asamblea General de las Naciones Unidas.

En cambio acompañaron a la mandataria representantes de la Asociación de Familiares y Amigos de Víctimas del atentado a la AMIA, Sergio Burstein y Daniel Komarovsky, quienes no ocultan su alineamiento con el kirchnerismo ni objetarán la decisión que tome Cristina Kirchner en torno al pedido de diálogo político reiterado

por el gobierno iraní en la causa AMIA.

Pero también hubo otros factores que desataron recelos: la decisión de la AMIA de concederle el rol de orador central a

Mauricio Macri en la cena anual de la institución y la interna que se desató en la DAIA cuando el presidente Donzis decidió recibir a la conducción de la UCR para que le presentara su plan contra una reforma constitucional para la re-reelección de Cristina Kirchner.