Según operadores del mercado, buena parte de esos fondos ya se utilizaron para contener la cotización del dólar. Estimaciones privadas señalan que el Tesoro habría gastado entre USD 350 y 500 millones en una sola jornada, aunque el tipo de cambio oficial igualmente avanzó un 3,6%.

El Tesoro sólo compró unos USD 2.200 millones de los USD 7.100 millones que liquidó el campo y para eso bajó las retenciones a cero y asumió un costo fiscal de USD 1.200 millones.

Desde Portfolio Personal Inversiones (PPI) advirtieron que la combinación entre la brecha cambiaria y el pago de salarios aumenta la presión sobre la demanda minorista. En la misma línea, el economista Christian Buteler remarcó que faltan “16 ruedas hasta las elecciones”, lo que acota el margen de maniobra oficial.

De acuerdo con cálculos de operadores, el Tesoro sólo tendría capacidad de intervención para un máximo de cuatro jornadas más con el nivel actual de ventas. En este escenario, la atención del Gobierno no sólo está puesta en las elecciones legislativas del 26 de octubre, sino también en la reunión prevista entre el presidente Javier Milei y Donald Trump el 14 de octubre, donde se espera que pueda surgir algún respaldo que brinde calma a los mercados.