Redacción EL ARGENTINO
La renuncia de José Luis Espert como candidato de La Libertad Avanza (LLA) en la provincia de Buenos Aires abrió un complejo escenario judicial y logístico de cara a las elecciones legislativas del 26 de octubre. La decisión de Espert obliga a la justicia electoral a determinar cómo quedará la lista oficial y si corresponde la reimpresión de las boletas únicas, un procedimiento que según estimaciones oficiales tendría un costo cercano a los 13 millones de dólares y deberá realizarse con plazos muy ajustados.
Según el Código Nacional Electoral, ante la renuncia de un candidato oficializado, el reemplazo corresponde a la persona del mismo género que sigue en la lista, en este caso Diego Santilli. Sin embargo, fuentes judiciales advierten que la paridad de género también podría habilitar a la diputada Karen Reichardt a ocupar el lugar vacante. La decisión final dependerá del juez federal con asiento en La Plata, Alejo Ramos Padilla, aunque el Gobierno ya anticipó que apelaría ante una resolución adversa, remitiéndose finalmente a la Cámara Nacional Electoral.
Hasta el momento, la impresión de boletas únicas no se completó en la totalidad del padrón bonaerense, lo que incluye la Primera y la Tercera secciones electorales. La Dirección Nacional Electoral, bajo la conducción de María Luz Landívar, sería la encargada de supervisar la reimpresión, un proceso que en este contexto podría demorar entre 10 y 12 días. El Gobierno sostuvo que esta medida no es un pedido, sino una consecuencia jurídica de la renuncia, y destacó la necesidad de “cuidar a la ciudadanía en su voto”.
La renuncia de Espert se produce tras un escándalo vinculado a 200.000 dólares que recibió en 2020 del empresario Fred Machado, investigado en Estados Unidos por narcotráfico, lavado de dinero y estafa. La causa también involucró vuelos realizados por Espert en aeronaves de compañías ligadas a Machado. Ante la presión política y mediática, Espert decidió dar un paso al costado.